Mucha gente se traslada muy lejos en busca de sitios para encerrarse en una burbuja y no tener contacto con la realidad. Sólo así pueden concentrarse.
La burbuja honei no solo es un lugar de trabajo, es un espacio de vegetación y arte que se esfuerza por recrear este mundo.
Ubicada en la zona de la Alameda, tiene siempre las puertas abiertas para que te acerques y te atrevas a descubrirla.